Ya son 105 los procesados o condenados por delitos de lesa humanidad e investigan a otros 39
Actualizado: 30 sept
Por Georgina Mayo
Hasta ahora 105 oficiales de las Fuerzas Armadas y policías que actuaron durante la dictadura fueron condenados y están siendo investigados con pedidos de procesamiento y formalización por homicidios muy especialmente agravados, abuso de autoridad contra los detenidos (torturas), supresión de estado civil, privación de libertad y desapariciones forzadas. La acción del tiempo transcurrido entre la salida de la democracia -Ley de Caducidad mediante- y las investigaciones iniciadas de lleno desde 2005, surtieron efecto: un total de 12 oficiales murieron tras sus condenas o esperando la resolución de la causa.
Antes de 2018, es decir, antes de que el Fiscal Ricardo Perciballe encabezara la Fiscalía Especializada en Delitos de Lesa Humanidad, la justicia penal condenó a militares y oficiales por violaciones a los derechos humanos durante la dictadura en 15 causas distintas que responsabilizaron a 29 integrantes de las Fuerzas Armadas y de la Policía. Entre esas causas se encuentra el procesamiento del expresidente de facto Juan María Bordaberry en dos causas distintas: la referente a la muerte de los ex legisladores Zelmar Michellini y Héctor Gutiérrez Ruiz y los militantes políticos Ricardo Barredo y William Whitelaw fueron condenados, precisamente, Juan María Bordaberry y el excanciller Juan Carlos Blanco como coautores de cuatro delitos de homicidio muy especialmente agravados a la pena de 30 años de penitenciaría. Bordaberry también fue condenado como autor de un delito de atentado contra la Constitución en reiteración real con nueve crímenes de desaparición forzada y dos crímenes de homicidio político a la pena de 30 años de penitenciaría.
Entre esas 15 causas que se llevaron antes de 2018, está la referente a la muerte de Ramón Peré fue condenado por homicidio un exoficial del Ejército Tranquilino Machado a la pena de 4 años de penitenciaría y la de los responsables del homicidio muy especialmente agravado de Ubagesner Chávez Sosa.
En tanto hay 24 causas cuyas condenas ocurrieron luego de 2018 e incluyen a 37 procesados y condenados por los delitos de homicidios, privación de libertad, abuso de autoridad contra los detenidos. Los penas de penitenciaría van desde 6, 12, 14 años hasta los 23 y 25 años de cárcel. Entre las 24 causas posteriores a 2018, fue condenado Eduardo Ferro como coautor de un delito de desaparición forzada a la pena de 21 años de penitenciaría en el caso Oscar Tassino. También entre estas causas se encuentra a la de los responsables de la privación de libertad, supresión del estado civil y abandono de los hermanos Julien: José Ricardo Arab y Jorge Silveira a 10 años de penitenciaría.
En tanto existen aún 16 causas pendientes con 39 imputados por distintos delitos investigados por el fiscal Perciballe. Entre ellas se encuentra pendiente la resolución de la causa que investiga la desaparición forzada Gelos Bonilla en el Batallón de Ingenieros 4°, torturas en el Regimiento de Caballería N.º 10 con sede en Bella Unión, torturas y privación de libertad contra Gilberto Coghlan y otros en Caballería N.º 4 y torturas en el Fusna y Prefectura Nacional Naval.
Torturas por reunirse en La Esmeralda: la causa de Treinta y Tres
Los tres militares Sergio Rombys Kulikov, Juan Luis Álvarez y Mohacir Leites fueron condenados a 12, 11 y 8 años de penitenciaría por la jueza del departamento de Treinta y Tres María Eugenia Mier. Los condenó por el delito de torturas a 40 jóvenes del departamento de Treinta y Tres que en 1975 fueron perseguidos, detenidos y torturados. Los militares tenían el objetivo de averiguar porqué ese grupo de personas había asistido a una reunión de la UJC en el balneario La Esmeralda, Rocha. Uno de los puntos que mantuvieron en común los tres oficiales condenados durante las declaraciones se ubicó en que no presenciaron los interrogatorios, que no torturaron detenidos, aduciendo además que las detenciones fueron legítimas. Ni la fiscalía ni la justicia les llevó esas explicaciones.
-¿Recibieron torturas? No
- ¿Malos tratos? No
-¿Tratos Degradantes? No
-¿Sometidos a plantones? No
Rombys, Álvez y Leite fueron condenados por los delitos de abuso de autoridad contra los detenidos, y reiterados delitos de lesiones graves y con reiterados delitos de privación de libertad. La represión no solo alcanzó a adolescentes, dice la condena a la que accedió 25siete, puesto que en el mismo contexto también fueron detenidos algunos integrantes del Partido Comunista, así como los representantes de la Mesa Política del Frente Amplio de la ciudad de Treinta y Tres y hasta un simpatizante de la coalición de izquierda.
Una vez detenidos fueron encapuchados y maniatados, así como sometidos a plantón mientras estuvieron detenidos sin pasar a juez sumariante. En parte de ese período se les privó de la comida y se le limitó el agua. Quienes tenían más de 18 años (y en ocasiones algunos menores) fueron sometidos a submarino en agua con orina y sangre, picana eléctrica, colgamiento, caballete y la técnica del teléfono que consistía en fuertes golpes en los oídos. Tales apremios fueron realizados entre otros por los encausados Rombys, Álvez y Leite. Algunas de las adolescentes fueron sometidas a tacto rectal o vaginal y se les suministró penicilina porque los militares aducían que tenían enfermedades venéreas. Los apremios físicos fueron intercalados con interrogatorios. Todos fueron interrogados por su filiación política, así como sobre los vínculos con otros integrantes. En tanto a los adolescentes se les interrogó especialmente por su participación en la reunión realizada en el balneario La Esmeralda. Las torturas como los interrogatorios fueron realizados por los integrantes del S2 (Inteligencia) que en ese entonces estaba a cargo del Teniente 1º Juan Luis Álvez (Memorando de fecha 23 de Abril de 1975 en imagen 6 del expediente S 266/86 ante Penal 7º turno proporcionado por AFPROJUMI). Álvez estuvo acompañado por otros oficiales de la Unidad como los Alférez Mohacir Leite y Wellington Sarli, así como el Capitán Héctor Rombys.
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