La versión militar de la muerte de Roslik: asfixia y rotura de hígado
Actualizado: 20 sept 2020
por Georgina Mayo.
La Junta Médica militar conformada en 1984 indicó que Roslik murió por asfixia y violencia multicausal. El candidato a intendente de Cabildo Abierto, Alberto Loitey, dijo que se trató de una muerte por paro cardíaco.
El candidato a intendente revistó como oficial del Batallón de Infantería Nº 9 de Fray Bentos. La Diaria recoge sus declaraciones del semanario El Eco que indica que Loitey declaró ante la justicia y relató que si bien él estaba en ese batallón cuando Roslik estuvo preso, negó recordar al médico y dijo que murió por paro cardíaco como muere cualquiera.
Sin embargo, el propio expediente militar del caso que incluye un informe de médicos militares sobre el último homicidio de la dictadura, define otros puntos distintos al resumido por el candidato de Soriano.
En el recurso de casación presentado por el fiscal Ricardo Perciballe ante la Suprema Corte de Justicia, en mayo pasado, se extraen las conclusiones de la Junta Médica militar. El recurso de casación sostiene en uno de sus puntos que la muerte de Vladimir Roslik se produjo como consecuencia de los apremios físicos, a los que fuera sometido. El día 14 de abril de 1984, Roslik fue detenido por personal del Ejército dependiente del Batallón de Infantería Nº 9, donde fue trasladado por la fuerza. Falleció luego de torturas dos días después de su detención.
La Junta Médica militar dispuesta por el el juez militar estuvo integrada por un médico supernumerario, uno de Sanidad Policial y un tercreo del servicio público. La Junta Médica militar indica que no se dispone del protocolo de la primera autopsia, no se conocen las circunstancias inmediatas en las que ocurrió el deceso, que existen lesiones de índole traumática, superficiales, parietales y viscerales, éstas últimas asociadas a intensa palidez de piel y mucosas. Se constatan además signos directos e indirectos de asfixia y la presencia de líquido anómalo. El expediente militar sostiene que la causa de muerte fue anemia aguda y síndrome asfíctico. Señala que no es posible, tratándose de una segunda autopsia, en las condiciones reseñadas, determinar cuál de estos elementos, o bien su asociación lesional, ha sido la causa última de la muerte.
Asfixia y desgarro en el hígado
La Junta Militar le respondió a la justicia de esa órbita de que se trata de una muerte violenta multicausal, que existió ingreso a los bronquios de un material fluido, de aspecto similar al del estómago, que al ser aspirado en vida, obstruyó la vía aérea determinando una asfixia aguda rápidamente mortal. La Junta también indicó que existió un desgarro del hígado con un hematoma que determinó un secuestro sanguíneo a la circulación general. Se comprobaron los estigmas de múltiples traumatismos superficiales y profundos. El informe del expediente militar sostiene que todas las causas antedichas han concurrido para provocar la muerte estando tan interrelacionadas entre sí que no pueden separarse.
Violencia multicausal
Finalmente a solicitud de la Defensa del imputado Sergio Coubarrere se expidió el médico de iniciales CMC que concluyó que existen signos de violencias externas e internas, signos de asfixia. Agregó que ninguna de las causas aisladas posiblemente provocaron una muerte súbita, pero la consecuencia de ellas, sumada a condiciones fisiológicas y psicológicas especiales, son capaces de llevar a un paro cardio-respiratorio que produzca la muerte.”En suma: Muerte multicausal con signos de violencias.”
Cuatro meses por homicidio
Por eso el fiscal Ricardo Perciballe indicó en su recurso de casación que no cabe lugar a dudas que el delito es el de homicidio muy especialmente agravado por la grave sevicia. Sergio Coubarrere fue condenado por la justicia militar como “autor responsable de los delitos de ataque a la fuerza moral de las fuerzas armadas por abuso de autoridad y homicidio”. Lo condenó a dos años de penitenciaría. No obstante, Coubarrere solo cumplió una preventiva de cuatro 4 meses y 18 días.
Suprema corte decide
El Tribunal de Apelaciones indicó, entre otros puntos, que en este caso hay cosa juzgada y el fiscal Ricardo Perciballe presentó el recurso de casación ante la Suprema Corte de Justicia porque entiende que lo que hubo es cosa juzgada fraudulenta.
Publicación original 18/08/2020
Comments