Primavera
Por Baltasar Aguilar Fleitas
Hemos esperado bastante su llegada pero ahí está la prestigiosa primavera.
Cuando nos referimos a la primavera en el arte se nos instala inmediatamente en la mente el clásico y famoso cuadro de Sandro Botticelli (1445-1510). Considero que es una obra sobrevalorada, pero sin dudas hermosa e ineludible.
La mitología en la que se sustenta está directamente aludida en el cuadro. Veamos quiénes son y qué hacen los nueve personajes que allí se ven y que podemos ubicar en un triángulo que tiene su base abajo y el vértice en Cupido, la figura alada que está en el centro, arriba.
A la derecha, Céfiro, el viento del oeste que anuncia la primavera, loco de amor por la ninfa Cloris, la secuestra y ella, que tiene puesto un vestido transparente, se vuelve para mirarlo, sorprendida. Cloris es la ninfa de las llanuras felices según Ovidio, la deidad de los jardines. De su boca salen flores y por influjo del viento se transforma en Flora que reparte rosas en el jardín. Flora tiene, como es lógico, un vestido con motivos florales y eso más el collar y la diadema nos indican que es la diosa de la primavera.
En el centro está Venus, que viste un manto rojo pues es la diosa del amor, un sentimiento intenso en esta época donde el clima empieza a entibiarse. Detrás de ella, como coronándole, vemos el follaje del mirto, un árbol que representa la fecundidad.
Encima de Venus está Cupido, su hijo, con los ojos vendados (como se sabe el amor es ciego); dispara su flecha a las tres Gracias, hijas de Zeus, que representan la castidad, el amor y la belleza y siempre andan juntas, así también las pintó Rubens, 150 años después.
La Gracia del medio parece estar distraída mirando otra cosa. En realidad mira a Mercurio, enviado de los dioses, que está en el extremo izquierdo del cuadro, distraído en sus tareas; Mercurio no está por arrancar una fruta como parece, sino que, valiéndose de su caduceo, dispersa las nubes para que no echen a perder el momento.
La abundante flora toscana presente en el suelo es muy variada y se pueden identificar entre otras especies naranjos, margaritas, nomeolvides, violetas, flor de lis, jacintos, rosas, amapolas…
Primavera de Sandro Botticelli es un cuadro realizado entre 1477 y 1482. Es un temple sobre lienzo de grandes dimensiones (2,07 m de alto x 3,19 m de ancho), que se encuentra en la Galería Uffizi, Florencia, Italia.
