#SubiólaNafta - Para Fancap es la prueba que la LUC ni baja el precio ni brinda transparencia
Por Georgina Mayo
Luego del incremento del precio de los combustibles para esta medianoche, el presidente de la Federación de Funcionarios de Ancap, Gerardo Rodríguez, dijo que la decisión del Poder Ejecutivo demuestra “el fracaso de la regulación creada por el gobierno en la LUC (PPI) que perseguía 2 objetivos: por un lado bajar las tarifas y por el otro la transparencia en las decisiones de aumento del precio.
Este lunes el diario El País anunció el incremento subrayando que hace cuatro mese no sube el precio de los combustibles.
La decisión en principio tiene que ver con la suba del precio del barril del petróleo a nivel internacional. Según pudo conocer 25siete la nafta y el gasoil aumentará 3 pesos el litro.
En tanto, Montevideo Portal informó que la Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua (Ursea) que según el Precio de Paridad de Importación incluido en la Ley de Urgente Consideración (LUC) el aumento debe ubicarse en enero en 7,59% para el gasoil, 8.60% para la nafta Premium 97 y 8.73% para la nafta Super 95.
Ante la decisión del Poder Ejecutivo de aumentar este lunes el precio de los combustibles, el presidente de Fancap Gerardo Rodríguez, dijo a 25siete que “los hechos han demostrado que la LUC no solo no sirvió para bajar el precio de los combustibles, sino por el contrario subieron en forma significativa. Y tampoco brindó transparencia, porque el gobierno se ha encargado de manipular los precios según sus intereses violando sistemáticamente la norma que ellos mismos crearon”.
Entre los 135 artículos de la Ley de Urgente Consideración que serán sometidos a referéndum del próximo 27 de marzo se incluyen los artículos 235 al 237 que establece el nuevo criterio de aumento del precio de los combustibles. La normativa fue aprobada en julio de 2020 y su criterio no se aplica desde hace cuatro meses. La última columna del exconvencional del Partido Nacional Sergio Rodriguez Heredia para este portal indica que “varios analistas han sostenido que aplicar la fijación de precios prevista en la LUC implica un costo político porque significa subir el precio de los combustibles todos los meses”.
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